La exposición «Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora», organizada por Casa Nuestros Hijos La Vida y La Esperanza, en la ex ESMA, es una invitación a acercarse al pasado reciente argentino haciendo foco en la lucha de las Madres de Plaza de Mayo desde una mirada educativa. Es un aporte para la construcción de una sociedad más justa, con plena vigencia de los Derechos Humanos.

La muestra permanente, impulsada por Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y desarrollada por el Ministerio de Educación de la Nación, con el apoyo de la Universidad Nacional de José C. Paz, forma parte de una serie de acciones que tienen por objetivo mantener viva la memoria y la transmisión del pasado reciente a las nuevas generaciones.

A 40 años del retorno de la democracia en Argentina, la historia de las Madres, forma parte de la memoria colectiva. Esta muestra recupera voces, vivencias, y estrategias de su lucha, como parte de un legado imprescindible para la sociedad y especialmente para las instituciones educativas que visiten este espacio.

La exposición reúne objetos históricos, registros fotográficos, documentales y audiovisuales que permiten aproximarse a la historia de las Madres, a la historia de un país que continúa sosteniendo la bandera de Memoria, Verdad y Justicia como emblema para lograr una sociedad con más justicia social, con más derechos. Se trata de una exhibición que busca llegar al público desde otro lugar, desde lo afectivo.

Paula Maroni, directora de la Casa Nuestros Hijos La Vida y la Esperanza, explica que este proyecto requirió de un trabajo de mucha investigación donde fue muy difícil la selección de la información y el recorte de lo que se iba a transmitir. “Ya definidos los contenidos, empezamos a trabajar un poco en la búsqueda de información lo que implicó averiguar cuáles fueron todas las madres que pasaron por Madres Línea Fundadora, o sea cómo institucionalizar algunas cuestiones que Madres no tenía”, cuenta la nieta de Enriqueta Maroni, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora. En esa línea, agrega que “una vez más esta historia se reconstruye a partir del boca a boca, del contacto con las familias, de recuperar o construir esos listados y empezar a articular con diferentes instituciones como el Archivo Nacional de la Memoria, Memoria Abierta, CELS, Archivo General de la Nación, entre otras. Luego viene la etapa de buscar objetos, fotos, historias y armar equipo de trabajo para poder llevar adelante esta muestra”.

En cuanto a lo que transmite este proyecto, Maroni resalta que «visitar esta exposición permite conectar no solo con la historia de las madres sino también con el olor de una época”. Y agrega: «Cuando se piensa en contar una historia, el contexto se vuelve fundamental porque «si el contexto está bien explicado y bien planteado, esa historia, ese objeto, esa foto tiene un sentido particular.

Por su parte, Sabrina Osowski, responsable del Área de Institucionales de la Casa Nuestros Hijos La Vida y La Esperanza, explica que para la realización de la muestra se trabajó con material de archivo desde una mirada educativa pensando en la consolidación del legado de las Madres y la transmisión de su historia a las futuras generaciones. «Es la voz de las Madres puesta en contexto y trabajada pedagógicamente, pero no pretende tener una exhaustividad absoluta respecto al terrorismo de Estado sino es poner en contexto el surgimiento de las Madres para entender la desaparición de sus hijos e hijas, la militancia de ellxs pero principalmente es la aparición en la escena pública de ellas”, dice Osowski. 

Pensado como un legado para las nuevas generaciones, el espacio que está dentro de la ex ESMA reúne diversos retratos de las Madres con su emblemático pañuelo blanco y más de mil registros documentales y audiovisuales recopilados de archivos nacionales y también de las propia organización de Derechos Humanos.

Además del recorrido fotográfico en planta baja, el primer piso propone distintos ejes como medios de comunicación, búsqueda y estrategias de visibilización, vida cotidiana, quiénes fueron sus hijos e hijas, padres de la Plaza – una mención para quienes no formaron una organización, aunque siempre estuvieron presentes – y la lucha por la memoria, la verdad y la justicia.

En momentos en donde se pone en el centro del debate público la discusión sobre lo ocurrido durante la última dictadura cívico militar, existe una cualidad que tienen los organismos de derechos humanos que es la posibilidad de dar testimonio de la pérdida, de la lucha, de la organización y de la resistencia. Esta muestra permite entrar a lo que sucedió durante el terrorismo de Estado desde otro lugar, es decir de una forma más sensible, más luminosa, en un momento en el que se ponen en cuestión algunas cosas.

Hay algo del cuidado que se ve mucho en la historia de las Madres en general y en esta muestra en particular que tiene que ver con la lucha colectiva, el mensaje que solo no vas a llegar a ningún lado que hay que juntarse para que te escuchen”, explica Osowski. Y continúa: “Hay algo de entender el dolor, de prestar atención al que está al lado, de acompañar, que son valores muy importantes en momentos de descomposición y en donde lo individual prima todo el tiempo. Las Madres son el símbolo de estos 40 años de democracia porque fundan un acuerdo que permite entender cuál es el límite como sociedad y desde ahí es dónde se construye”, concluye.

En ese sentido, Maroni resalta que “en estos 40 años, en el recorrido de las Madres vemos que todas sus acciones han sido una contribución a fortalecer la democracia, cada acción que ellas hicieron fue en esa dirección”.

Las Madres son mujeres cuyas hijas e hijos fueron detenidos desaparecidos por el terrorismo de Estado. Empezaron a buscarlos en plena dictadura, primero de manera individual y al poco tiempo constituyeron una agrupación que transformó el dolor personal en lucha colectiva.

Encabezaron la más contundente oposición a la dictadura, a partir de la denuncia y el reclamo por la aparición con vida de sus hijas e hijos primero y luego exigiendo Memoria, Verdad y Justicia. Su lucha y la de todos los organismos de Derechos Humanos es un pilar fundamental de la democracia de nuestro país.

La muestra se puede visitar martes, miércoles y jueves de 10 a 16 hs.

Facebook
Twitter
WhatsApp